¿Por qué es necesario un seguro de vida?
Un seguro de vida es un seguro que contratas para que cuando fallezcas tu familia, o las personas que tú decidas, reciban un dinero. En la práctica esto quiere decir que tú pagarás una mensualidad ahora a cambio de que si tú mueres por cualquier causa tus “beneficiarios” reciban de la aseguradora o un pago único o una mensualidad durante un tiempo acordado.
Por lo tanto, los seguros de vida se usan frecuentemente para asegurarte (nunca mejor dicho) de que por ejemplo tu pareja e/o hijos no tengan problemas económicos cuando tú ya no estés.
Además de proteger a tus seres queridos para el caso de tu fallecimiento, puedes añadir un seguro para que te paguen una cantidad a ti en caso de que tú sufras una limitación física o psíquica y no puedas seguir trabajando, faltando por tanto tus ingresos para ti y tu familia.
En otras palabras, los seguros de vida e invalidez están para asegurarte unos ingresos para cuando tú ya no puedas trabajar.
En España es muy habitual contratar un seguro de vida para evitar que tu pareja no se encuentre con que no pueda seguir pagando la hipoteca de vuestro piso cuando tú ya no estés. De hecho, casi siempre es el propio banco que te da la hipoteca el que te exige que contrates un seguro de vida cuando te da la hipoteca. Así, si falleces, la aseguradora le pagará al banco la deuda pendiente que quede de la hipoteca y tu familia podrá quedarse en la vivienda sin tener que pagar ya nada de hipoteca.
Pero ese es sólo un ejemplo de lo puedes querer cubrir para el caso de que fallezcas. Hay otras muchas finalidades que le podrías dar al dinero que pagará un seguro de vida. Si, por ejemplo, ya tuvieras una vivienda en propiedad libre de hipoteca, pero tuvieras hijos pequeños, podría ser conveniente que firmaras un seguro de vida por el importe que vayan a necesitar para ir a la universidad, si ya tú no estuvieras.
Al contratar un seguro de vida hay que tener en cuenta para qué lo quieres y tus necesidades reales. Hay una gran oferta de posibles seguros de vida con coberturas adicionales (más allá de pagar un dinero al fallecimiento por cualquier causa) que pueden o no ser adecuadas para ti. Es importante mantener la cabeza fría y elegir bien.
Especialmente cuando contratas una hipoteca y te ponen la condición de contratar un seguro de vida, vale la pena comparar no sólo el interés que te van a cobrar por el préstamo hipotecario, sino también cuánto vas a pagar por el seguro. Hay casos en los que lo que se paga por el seguro puede ser más dinero de lo que acabes pagando por intereses durante la vida de la hipoteca.
Para que te sientas seguro/a, nosotros te podemos asesorar para encontrar el seguro de vida o invalidez que más se adapte a tus necesidades y preferencias.